Apuntes del taller La fluidez hoy del 5/6/12
•Marcelo trajo el libro El arte gaseoso, de Y. Michaud que, creí entender, habla de una difusión del arte por toda la cultura; algo así como la expansión del diseño a todas las esferas de la vida (incluyendo por supuesto lo político, lo económico, lo institucional, lo personal, etc.).
•Alicia planteó la cuestión de la relación entre ética y estética. Se abrían (al menos) dos caminos:
oLa estética profusa contemporánea como el desplazamiento de la ética.
oLa cuestión de la ética de la estética.
•Luego de algunos paseos por cuestiones psi, se nos hizo activo tomar el segundo camino. Destilo la conversación.
oPor un lado, el arte tiene la ética de la transformación, del hacer, del hendir, la materia con la que trabaja.
oPor otro, la estética no se limita al arte, y es sensibilidad (etimológicamente, ese es su significado). En este sentido, estética es una práctica inherente, e ineludible, a toda subjetivación. Dicho psicoanalíticamente, hay estética allí donde un contacto físico es también fantasmático. La estética es sensibilidad, pero sensibilidad no es solo tacto sino también fantasía. Sin ese tándem, el cachorro humano no se hace persona.
•Así que se nos conformaron dos espacios en los que ubicar lo estético.
oPor un lado, el espacio estetizante, ornamental, o, más propiamente, el del diseño de la apariencia.
Aquí la práctica estética es práctica diseñadora, asimilable a la égida de la imagen: estetizar es photoshopear la apariencia y/o, directamente, diseñar la imagen de lo deseable. Estetizar es una práctica que conforma flujo de obviedad, que lo gestiona (fluyendo con él, incluso cuando lo hace como afluente y como efluente, pues el flujo de obviedad no tiene orillas ni nacimiento ni desembocadura final).
Estetizar es una operación crucial para que un punto social (sea una empresa, grupo, institución, persona, proyecto, producto, candidato, plaza o lo que sea) logre introducirse en la red. No sigue una ética sino un cálculo; gestiona su introducción, o permanencia o reintroducción en el flujo de obviedad.
Nunca huelga aclarar que la estetización no es optativa: si no te diseñás, si no “te producís”, no existís; luego, esta práctica ‘ornamental’ no es adjetivante sino sustantiva. La imagen, como dice Tiqqun, es «ese hechizo que nos hacer ver la realidad repleta de arrugas, fracasos, peligros, grasas y ataduras». Así, aquello que no da la apariencia de lo imaginal queda invisibilizado/despreciado/temido y sometido (incluso por uno mismo ) a reencauzamiento.
oPor otro lado, el espacio de la estesia primigenia, basal. Aquí leímos un pasaje de Generación post-alfa (p. 205) de Bifo que comienza citando a un tal Mistura:
“‘La relación con otros se apoya sobre esta estructura carnal de la sensibilidad y el modo en que se tocan las dos manos constituye su prototipo… El otro hombre y yo mismo somos como los órganos de una única intercorporeidad; la copresencia de dos manos, debido a su pertenencia al mismo cuerpo, se ha extendido al otro.’
“El descubrimiento de lo sentido en tanto sensible, la conciencia del hecho de que el cuerpo del otro que estamos tocando no es solamente objeto de nuestro toque, sino también sujeto de una percepción del toque, es el sentido de la empatía sin la cual la relación social se vuelve un infierno. Ningún discurso sobre las relaciones sociales puede prescindir de la sensibilidad entendida como estesia difusa.”
Y esta estesia difusa es base de la ética: “Si la comprensión carnal de lo sentido en tanto sensible desaparece, no existe más ninguna base para la convivencia, no existe más ninguna base para la ética, ni tampoco para la política como ciencia éticamente fundada. La ética no es, en efecto, definición de normas universales, sino percepción sensible de la universalidad del cuerpo extenso. Si la percepción del cuerpo extenso se interrumpe, si la empatía desaparece, no existe ya ninguna ley.”
Así podemos pensar la estética como la condición y la piedra de toque de la ética: pensando la ética como la experiencia de que mi cuerpo es continuidad sensible del cuerpo del otro, experiencia de la continuidad sensible entre los cuerpos.
•Esta práctica estética se da en un espacio indeterminado. Aquí la práctica estética es encuentro incalculable, es apertura a un proceso incalculable.
•Este proceso produce su ética singular, que es en primer lugar ética del encuentro, una disponibilidad subjetiva a una sensibilidad de lo que se encuentre . El encuentro es producción de un sensible y de una sensibilidad; produce cuerpo extenso y produce sentido; produce estesia y produce ética.
•Hay entonces dos “estética”. Por un lado, la de la égida de la imagen, que no se orienta por una ética sino por un formato, una gramática definida por un protocolo de comunicación, por un cálculo (cuánto voy a ganar en dinero, en contactos, en amigos de facebook, en visibilidad, etc.). Por otro, la del encuentro de los cuerpos, la de la continuidad sensible, la capaz de producir una ética del encuentro, una apertura a lo contingente, al proceso.
•La primera estética, ornamental y automática, desestima e invisibiliza la segunda, basal y pensada. Mejor dicho: no la siente; la primera es un régimen de sensibilidad que insensibiliza para la segunda.
•Podemos proponer una consigna ética-política: estetización de la vida o vitalización de la estesia.
•Preguntas que quedan picando:
oBifo dice que la “hiper-semiosis des-sensibiliza la percepción del cuerpo del otro, y entonces todo está permitido porque no sentimos más ni el placer de los otros ni el sufrimiento de los otros”. Uno así concluye que la conexión virtual sin contacto físico produce pérdida de ternura y aumento de la crueldad. Sin embargo, cuando uno trata con pibes de 14 años, son mucho más humanos que lo que esa pintura nos hace suponer; no se los ve tan crueles como pinta Bifo en casos patológicos (Melissa, Cho, Abu Ghraib) lindantes con lo normal. En otras palabras, no entendemos la sensibilidad de los pibes.
o¿Qué prácticas estéticas vitales se dan entremezcladas en la red semiocapitalista, en la red de la estética ornamental? ¿Qué encuentros practican? ¿Qué sensibilidad/es crean?
o¿Qué dispositivos hacen lugar a la ética-estética de la estesia difusa? ¿Un mural pintado en conjunto, por ejemplo?, ¿un taller de Braile para hacer tarjetas navideñas para la escuela de ciegos del barrio?
o¿Qué leemos?
•El taller queda abierto a lo que se encuentre.